El miércoles 26 de febrero, a las 20 h., celebraremos Santa Misa de imposición de la ceniza.
Con el Miércoles de Ceniza se inician los 40 días en los que la Iglesia llama a los fieles a la conversión y a prepararse verdaderamente para vivir los misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo en la Semana Santa.
En la Misa se bendice e impone en la frente de los fieles la ceniza hecha de las palmas bendecidas en el Domingo de Ramos del año anterior.
La ceniza es un símbolo. Su función está descrita en un importante documento de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, más precisamente en el artículo 125 del «Directorio sobre la piedad popular y la liturgia»:
“El comienzo de los cuarenta días de penitencia, en el Rito romano, se caracteriza por el austero símbolo de las cenizas, que distingue la Liturgia del Miércoles de Ceniza. Propio de los antiguos ritos con los que los pecadores convertidos se sometían a la penitencia canónica, el gesto de cubrirse con ceniza tiene el sentido de reconocer la propia fragilidad y mortalidad, que necesita ser redimida por la misericordia de Dios. Lejos de ser un gesto puramente exterior, la Iglesia lo ha conservado como signo de la actitud del corazón penitente que cada bautizado está llamado a asumir en el itinerario cuaresmal. Se debe ayudar a los fieles, que acuden en gran número a recibir la Ceniza, a que capten el significado interior que tiene este gesto, que abre a la conversión y al esfuerzo de la renovación pascual”.
La ceniza, como signo de humildad, le recuerda al cristiano su origen y su fin: «Dios formó al hombre con polvo de la tierra» (Gn 2,7); «hasta que vuelvas a la tierra, pues de ella fuiste hecho» (Gn 3,19). Las cenizas son impuestas en la frente, haciendo la señal de la cruz con ellas mientras el ministro dice las palabras bíblicas: «Acuérdate que eres polvo y en polvo te convertirás», o «Conviértete y cree en el Evangelio».
Turno de adoración de Luz y Vela
Así mismo, el día anterior, martes 25 de febrero, a las 18,00 horas, corresponderá a nuestra Hermandad el turno de adoración de Luz y Vela en la Parroquia de Santa Cruz. Este turno se enmarca en el llamado Triduo de Carnaval o de Carnestolendas.
Los Solemnes Cultos de Reparación y Desagravio del carnaval se celebran tres días antes del Miércoles de Ceniza, estando Jesús Sacramentado en Exposición mayor en la sede Parroquial de Santa Cruz, con turnos de adoración y vela de una hora por distintas asociaciones y hermandades de la ciudad. Durante los tres días, se imparte a la reserva la Bendición con el Santísimo Sacramento y en el último día se realiza Procesión Claustral con Su Divina Majestad bajo palio.



